Cuando te hablan por detrás

Ratio: 5 / 5

Inicio activadoInicio activadoInicio activadoInicio activadoInicio activado
 

Ayer por la tarde fui a visitar a mi abuela a la residencia. En estos sitios, para el que no esté muy acostumbrado, tienen unas medidas de seguridad considerables por la propia protección de los pacientes. Por ejemplo, muchas de las puertas suelen tener código, accionador o llave y colocan carteles pidiendo a los visitantes que se aseguren de mantenerlas cerradas después de cruzarlas. En este caso, en la puerta exterior del complejo tienen un sistema en el que tienes que llamar a un interfono y esperar a que accionen la apertura. La verdad, a veces tardan un poco y resulta algo tedioso. Pues me encontraba justo entrando al centro tras esperar a que me abrieran y obedientemente procedí a cerrar la puerta a conciencia. De repente apareció una señora corriendo y gritando algo. Intuí que quería entrar, pero mi cerebro ya había dado la orden, no fui capaz de rectificar y le cerré literalmente la puerta en la cara. La señora se molestó muchísimo y empezó a increparme muy alterada a través de la puerta. Le pedí mil perdones e intenté explicarle que tengo cierta pérdida auditiva y que no me entero cuando me hablan por detrás. No pareció atenderme ni contentarse con mi disculpa.

Una vez dentro del edificio, nos cruzamos varias veces e intenté con mi gesto más amable volver a disculparme, pero de nuevo no me hizo caso y sólo recibí miradas de desaprobación. En la última ocasión que nos encontramos se dirigió a mí y empezó a recriminarme mi acto argumentando airadamente sobre las malas formas y falta de educación de los jóvenes hoy en día. Ya no tuve más ganas de volver a explicarme. Simplemente asentí y aguanté estoicamente su reprimenda.

En otra ocasión, siendo adolescente, me encontraba en una plaza con varios comercios haciendo recados que me había encomendado mi madre. Volvía ya hacia casa cargado de bolsas atravesando las terrazas de los bares repletas de gente y bullicio, cuando apareció un señor delante de mí y me dijo: “¿eres tonto, subnormal o qué te pasa?, ¡te he llamado cuatro veces, no se puede ir tan empanao por la vida, la próxima vez me lo quedo!” Y me dio un billete de 50 euros que se me había caído del bolsillo. A pesar de las formas, todavía estoy muy agradecido a su buen acto y espero que la siguiente vez no se lo quedase.

Años más tarde en una noche cerrada, caminaba algo inquieto por una calle que no me daba buena espina cuando noté por detrás un contacto sobre mi hombro. Instintivamente me revolví girando el torso de manera muy enérgica propinando un codazo a la persona que me acechaba. Era una antigua amiga que hacía mucho que no veía y me había visto por casualidad. ¡Estuve a punto de fracturarle la nariz! Afortunadamente no le provoqué lesiones demasiado graves, pero ella perjuró no volver a intentar acercarse a mí por detrás si me volvía a encontrar.

Éstas y otras muchas anécdotas son ejemplos de situaciones que una persona con problemas de audición tiene que afrontar. La falta de seguridad por ausencia de percepción de los peligros, parecer despistado, borde o maleducado, el cansancio que supone tener que excusarse y explicar tu problema una y otra vez sin que te crean, las burlas en entornos escolares, laborales y sociales o simplemente no enterarse de un aviso o llamado. Y eso que quizás, estos hechos derivados de no oír por detrás sean una de las preocupaciones más nimias que la deficiencia auditiva puede provocar. La mayoría de las personas hipoacúsicas desarrollan una personalidad y unas capacidades cercanas a los superpoderes para combatir todo este tipo de dificultades sociales que son tan complicadas de cambiar. Desde Soul&Alegría queremos poner todo nuestro empeño en mejorar lo que sí está en nuestra mano: concienciar y visibilizar acerca de la discapacidad que menos se suele ver y que más banalmente se suele tratar.

Este sitio web está actualmente en desarrollo, pero estamos emocionados por lo que viene. Gracias por tu interés y paciencia. ¡Vuelve pronto para descubrir las novedades!
©2024 Soul & Alegría.

Search